Aclaración formal del dictamen DT sobre teletrabajo
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Más de dos semanas han transcurrido desde el polémico dictamen emitido el pasado 24 de agosto por la Dirección del Trabajo respecto al teletrabajo, en el cual se declaró ilegal combinar dicha modalidad laboral con trabajo presencial en una misma semana.
Luego de las críticas y alertas levantadas, rápidamente el director del Trabajo salió a aclarar (por la prensa) que lo que se quería decir, en forma similar a un dictamen de 2020, era que no se podía combinar en una misma semana teletrabajo “sin limitación de jornada” y trabajo presencial “con límite de jornada”, y que “es perfectamente posible que en la actualidad se pacte teletrabajo y trabajo presencial en una misma semana”.
Además de aclarar la polémica normativa, deben tomarse acciones, más allá de un reacomodo de equipos, que den señales de certeza al mercado laboral.
Como ya se ha advertido por expertos y organizaciones afectadas, dicha declaración no basta para aclarar la situación. Tampoco es suficiente para estos efectos reorganizar los equipos de trabajo internos a cargo de la emisión de estos documentos, tal como fue revelado por este medio a fines de la semana pasada. Una desprolijidad no sólo de fondo, sino también de forma que, en primer lugar, y previo a cualquier otra acción, debe ser corregida cuanto antes.
Lo anterior por cuanto, incluso según lo han señalado algunos expertos, dicho dictamen no sólo contraviene el objetivo “deseado” por el regulador, sino que es contrario a las leyes aprobadas en esta materia, lo que agrava la falta, pudiéndose incluso concluir que el regulador a cargo de interpretar la legislación laboral vigente la desconoce.
Además, dicho dictamen prácticamente coincidió con el fin de la alerta sanitaria, lo que generó aún más confusión en empleadores y trabajadores, muchos de quienes hoy, con un mercado laboral aún débil, sostienen su fuente laboral gracias a la opción de combinar en una misma semana teletrabajo y trabajo presencial, lo que la polémica norma impide.
El llamado no es sólo a aclarar formalmente cuanto antes la polémica normativa, sino a tomar acciones visibles, más allá de un reacomodo de equipos, que den señales de certeza a nuestro mercado laboral, en un contexto económico complejo donde urge fortalecerlo.
